miércoles, 21 de septiembre de 2011

Epílogo. En honor a la Carne Cruda de Javier Gallego

Quizá estemos a unos meses de un nuevo "cambio de parrilla" en radio 3, uno de esos que barren a los creadores de radio comprometidos como Javier Gallego, que con su Carne Cruda ayudan a descubrir la mirada dramática de esta comedia de vida.
La naturaleza carnal de la criatura amada es la corriente que atraviesa este poema de todos los vientos de Angela.
Como agradecimiento al trabajo de Javier Gallego y su equipo, hoy este poema les mirará con cercanía y agradecimiento por intentar que la educación no se convierta en una presa más, carnosa y fácil.

 
Epílogo




No eres un ángel.
Ya no eres un ángel, desde que estallaron
mis entrañas en mil fragmentos
de lágrimas desgarradas,
astillas de hierro,
como explotan el drama o la tormenta,
igual que revientan las vidas, que no estaban en la lista,
igual que fulmina la bomba,
desde que arrasaste conmigo, con mi sombra,
con los recuerdos que otros tenían de mí,
con los que yo tenía de nosotros.

Desde que le perdí el rastro a la belleza
fulminada bajo tus fauces,
desde que las moscas dejaron de tener interés
en el cadáver que de mi quedó,
con toda la incomprensión de un niño
de ojos arañados a tu partida,
desde entonces, ya no
volarás más por mi alcoba
como un hada,
ya no eres una ángel.
Gracias a tu crueldad
logré amarte como a una mujer.

Pero no tenías otras armas que tu carne,
privada ya de tu condición divina,
sólo carne para hablar, para decidir,
para caminar con todo tu peso, sin alas,
sólo te quedaba la carne, expuesta impúdica y promiscua
al paladar de otros, que
no podrían degustar jamás el aliento de las estrellas
que manaba tu sexo angélico antes,
aquel sabor que florecía para mí
cada vez que lograba ascender sobre la luz,
como ningún humano jamás hiciera:
así es como conocí aquel ángel de vuelo bajo.

Hoy ya no eres un ángel,
te he puesto carne de mujer, de hembra,

impredecible como los vientos,
sustancia de mujer amada por mí
en todos sus litorales:

Mujer horizonte de mi mano.

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